El castillo se alza sobre un elevado monte de fuertes pendientes cercano a la localidad del mismo nombre.
Se pude acceder a él partiendo de la fuente de San Pedro y subiendo por
un empinado sendero que , a través de la "rocha de castillo", conduce
hasta el castillo.
Los orígenes de Alcudia de Veo parecen estar en una pequeña alquería
islámica que debió ser reconquistada por las tropas de Jaume I hacia el
año 1238. Este monarca le otorgó Carta Puebla en 1242 aunque en ella no
se menciona todavía el nombre de la población. Tras el decreto de
expulsión de los moriscos, sus habitantes se sumaron a la sublevación de
la Sierra de Espadán, logrando resistir durante algún tiempo en la
fortaleza.
A pesar de la falta de documentos al respecto, su origen es sin duda
islámico. Sus ruinas siguen manteniendo un imponente porte que habla de
la importancia y tamaño que debió tener en su época de esplendor.
Puede observarse todavía la práctica totalidad del perímetro amurallado y
restos de la torre del homenaje y otras auxiliares. Por su
emplazamiento y lo evocador de sus ruinas resulta uno de los más bellos
parajes de la sierra.
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