En la zona más elevada del pueblo, se conservan los restos del castillo que fue conquistado a los musulmanes por Jaime I de Aragón a finales del siglo XIII y fortificado durante el reinado de Pedro IV.
La única entrada posible al recinto de Guadalest es a través de un portal abierto en la grieta de una roca, al final de una empinada rampa y de un tunel de 15m.
La fortaleza árabe, que incluye toda la población data del siglo XII-XVI. Del castillo en sí apenas queda nada, pues sufrio un terremoto en 1644, una mina voló la fortaleza árabe el 4 de abril de 1708, durante la Guerra de Sucesión y las murallas se acabaron de destruir en 1848, durante la segunda Guerra Carlista, aunque quedan en pie varios lienzos de muralla, la citerna y la torre del homenaje.
La fortaleza rocosa, que se alza a más de 500 m. sobre un peñasco, reflejandose en el embalse del mismo nombre que abastece de agua a la comarca de la Marina Baixa.
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