Esta torre, como muchas otras que hay a lo largo del litoral
mediterráneo, se edificó como consecuencia del informe que emitió el
arquitecto J. B. Antonelli el año 1563. Según este, al hablar de la
conveniencia de construir diversas torres en el litoral valenciano,
dice, refiriéndose a esta, "y otra más se podía aser donde vienen a
guardar de noche los de Tablada A partir de este momento se procedió a
su construcción para proteger el litoral de posibles incursiones
piráticas. Los vigías de esta torre estaban en contacto con los de las
torres de la Granadella e Ifach, de manera que pasaban rápidamente el
aviso a las tierras del interior en caso de peligro corsario proveniente
de la mar.
A lo largo de la historia son muchos los momentos en los que esta
torre es protagonista de diversos episodios, como el que ocurrió el año
1667 cuando hubo de defender un bajel napolitano, el "San José y Santa
Clara", que fue atacado por dos naves moras, habiéndose de refugiar en
este puerto donde naufragó la nave y fueron atendidos todos los sus
tripulantes por las autoridades de Teulada.
Edificada sobre el punto más alto del Cabo de Oro y casi en el límite
de los acantilados, es de planta circular, con un perímetro de 26
metros, y los muros en talud construidos con mampostería ordinaria y
enfoscados con mortero. El muro está coronado por ménsulas que, en la
parte de levante, sustentan un matacán. La torre, de 11 metros de
altura, es toda ella maciza hasta más de la mitad, de manera que no
pueda accederse a su interior desde el nivel del suelo por no disponer
de ninguna puerta. Solamente había una posibilidad de entrar y era por
medio de una escalera de cuerda que se descolgaba desde el interior.
Esta parte solamente consta de una sala con bóveda, sobre la cual estaba
la terraza donde se colocaban los centinelas para vigilar el horizonte.
Para subir a esta terraza desde la sala interior debía utilizarse una
escalera de madera.
A 126 metros de la torre en dirección sureste, hay un aljibe de
planta rectangular y bóveda interior que servía para abastecer de agua a
los soldados que se encargaban de la vigilancia del litoral.
Recientemente (1991) se ha restaurado parte del muro perimetral y de la
bóveda que, por el paso del tiempo y el efecto de las lluvias, se había
derrumbado. Además del servicio de vigía, esta atalaya podía también
hacer uso de dos cañones que defendían el puerto de Moraira los cuales fueron rescatados el año 1980, al hacer unos trabajos de desescombro en la playa del Puerto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario