La Torre de Monflorite es una antigua torre de señorío que perteneció a
los López de Gurrea. Formó parte de un castillo del que solo se conserva
esta torre gótica, totalmente restaurada en la actualidad. Está situada
en el núcleo urbano.
Es un edificio construido en sillares de arenisca, de planta rectangular
de 10 metros por 8 metros rematada por almenas que han sido restauradas
y modificadas por un tejado a cuatro aguas sobre un voladizo de madera.
Se estructura en dos pisos en un solo cuerpo levantado sobre un
basamento escalonado.
Su portada de acceso se caracteriza por ser de grandes dimensiones. La
puerta principal, situada en el paño norte, es en arco apuntado con tres
arquivoltas achaflanadas enmarcadas por una nácela. Existe una segunda
entrada bajo arco de medio punto en la fachada Oeste, que da acceso a la
segunda planta, llegándose a ella por medio de una escalera de piedra
exterior al edificio. La fachada principal presenta además interesantes
ventanas geminadas con arcos apuntados y decoradas con escudos. Sobre la
puerta Norte hay una ventana geminada con arcos apuntados trilobulados
tallados en bloque entero, en el cual están tallados, en las enjutas
exteriores, dos escudos en relieve. Otras dos ventanas iguales a ésta
abren en la planta superior de la fachada sur, en cuya planta baja
también abren dos series de tres saeteras.
Al interior, la planta baja cubre con bóveda apuntada y la superior
con cubierta de madera a dos aguas. A la planta superior se accedía
desde una escalera situada en la fachada trasera.
Una muralla rodeaba la torre, de la que aún quedan restos.
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