La leyenda apunta que es este palacio estvo a punto de nacer Fernando el Católico, pero, su padre quería que naciera en territorio aragonés, traslado a la parturienta a la villa de Sos para que
el futuro rey viera la luz allí.
La residencia , una vez restaurada, constaba de dependencias particulares, cuartos para el servicio, caballerizas y establo. Poco o nada se conserva de ello.
En la actualidad la fortaleza conocida como " del Príncipe de Viana " se limita a un edifio que, en 1519, se definía como " un cuarto apegado a la muralla de la villa, muy bien labrado de cantería con dos torres hermosas de cal y canto a los dos lados".
El edificio que actualmente se conserva fue adquirido por la Diputación Floral en 1949 , institución que corrió con los gastos de reconstrucción en 1965. Ésta muy bien documentada, consiguió que el edificio recuperara el empaque de antaño, así como sus dos torres almenadas y sus ventanales, góticos con parteluz.
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