El castillo-convento donde se asentó la Orden de Calatrava domina la ciudad desde lo alto. Casi todos los estilos han dejado su huella en él, desde el románico al barroco. Fue una especie de alcázar torreado de planta de trapecio, pero se modificó en el siglo XVIII. En la actualidad ha sido reformado y convertido en Parador Nacional. Pasando el arco de entrada, nos encontramos en una explanada ante el palacio barroco del siglo XVIII. En el ala norte del alcázar están alineadas la capilla y la torre del homenaje. Ene el ángulo roroeste, la torre de Lanuza. La capilla es la pieza principal de la etapa románica y fue la primera parroquia de Alcañiz. Al sur de la capilla nos encontramos el claustro, de reducidas dimensiones. La capilla y el claustro se adscriben al siglo XIII. La torre del homenaje es gótica, del siglo XIV, consta de cuatro plantas El interior sirve de atrio a la capilla y conserva unas bellísimas pinturas murales francogóticas.
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