El castillo de Monzón de Campos está formado por un sólido torreón de
planta cuadrada, de unos 13 metros de lado, al que se le adosa recinto
de forma trapezoidal.
La parte más antigua corresponde a
la torre del homenaje, cuadrada, maciza y de 13 metros de altura, que
presenta en la fachada orientada al interior del recinto una puerta de
acceso elevada, a la que se llega por medio de una pasarela. La portada
románica de la puerta de entrada a la planta baja no es original del
castillo, sino que corresponde a la desaparecida iglesia de Zenera de
Zalima, anegada por las aguas del pantano de Aguilar de Campoo. Todo el
torreón, construido con muy buena sillería, cuenta con numerosas
saeteras a diferentes alturas y en sus cuatro caras, así como un balcón
amatacanado situado sobre la entrada elevada. Esta coronado por almenas
terminadas en forma piramidal.
El recinto que se adosa a la torre es de la primera mitad del siglo
XIV, y también está construido con sillería, aunque de inferior calidad.
El acceso al mismo se realiza por medio de un arco apuntado sobre el
que figura el escudo de la familia Rojas. En la parte baja de la fachada
norte presenta una batería de saeteras.
Su aspecto nos
acerca a las luchas nobiliarias que se dieron en estas tierras
castellanas durante la Edad Media. Parece que el tiempo se ha detenido
en sus muros azotados por la aridez de sus campos.
La distribución interior de este recinto, aún recreando un cierto
ambiente histórico, es moderna, fruto de la restauración realizada para
adaptar su uso como parador de turismo, albergando un comedor de estilo
medieval. Anteriormente estaba presidido por un pequeño patio de armas
de forma cuadrada. En sus tres lados había grandes salas que servían
para almacenes y cuadras. Todavía se conservan los restos de una
chimenea y una escalera de subida a los adarves.
Está construido en buena mampostería de color blanquecino parecida al sillar.
El Castillo de Monzón de Campos es un privilegiado en cuanto a su estado
actual. Con aspecto tosco y uniforme, fue totalmente restaurado por la
Diputación Provincial en 1958, y convertido en hotel y restaurante. En
su patio de armas se celebran cenas medievales que se acompañan con
instrumentos de la época como la flauta de tres agujeros, el rabel o
laúd árabe, etc.. Sus habitaciones están decoradas al estilo medieval.
No hay comentarios:
Publicar un comentario